¿Te gustaría ir al teatro y más tarde comer en un restaurante con tres estrellas Michelín mientras escuchas un concierto de fondo? Tus deseos son órdenes ¡Bienvenido al futuro!
La reconversión de los centros comerciales avanza al son de las demandas de los usuarios, que reclaman un concepto rompedor que permita que sus inquietudes se vean satisfechas aquí y ahora.
Por ello, los emporios están empezando a apostar por aquello que los hace únicos: la relación de cercanía entre el cliente y las marcas. Una unión que se convertirá en ultrasensorial ya que los usuarios de los centros comerciales del futuro podrán usar sus cinco sentidos para disfrutar de un proceso de compra personalizado. Desde oler el mar de dónde proviene el pescado que se va a comer a ver cuál es la cadena de producción que ha seguido el producto que va adquirir.
Pero no solo de retail vivirá el hombre. Los usuarios cada vez exigimos más experiencia, pero haciendo menos. Queremos tener ante nosotros un amplio abanico de posibilidades sin tener que movernos del sitio y lo cierto es que lo conseguiremos. En un futuro no muy lejano, podremos comer en un buen restaurante, ir a un concierto y experimentar lo último en tecnología en un mismo espacio.
Para lograr estos objetivos, los centros comerciales del futuro fusionarán tres conceptos claves: Sostenibilidad, Innovación y Tecnología.
En los próximos centros comerciales el usuario disfrutará de un proceso de compra completo, dónde además de experimentar múltiples sensaciones, podrá interconectar con las marcas y, quizá, comprar algo físico.
Todo ello será posible gracias a los últimos avances tecnológicos y la apuesta por la innovación. Así, uno de los elementos más destacados será el reconocimiento facial, que permitirá ofrecer a los clientes procesos personalizadas basándose en datos de compras anteriores. Además, se implantarán espejos inteligentes que aportarán datos para saber si el modelo elegido es el idóneo, actuando como estilistas o asesores de compra.
¿Ya tienes lo que quieres pero odias hacer la cola para pagar? ¡En el futuro no será un problema! Al salir por la puerta de la tienda el producto se te cobrará automáticamente evitando largas esperas.
Toda esta experiencia estará amenizada por microclimas, adecuados según el tipo de ocio presente en cada espacio. Eso sí, nada de ello supondrá una agresión para el medio ambiente, pues los materiales y sistemas empleados cumplirán los más altos estándares de calidad en pro del ecosistema.